15 ideas para decorar la habitación de una niña
Decorar una habitación de niña no siempre es fácil. Hay que tener en cuenta sus gustos, su edad, lo rápido que crecerá y las actividades que va a realizar en su dormitorio. ¿Va a estudiar en él o dispondrá de otro lugar para hacerlo? ¿Será también su sala de juegos? ¿Dormirá sola, o con alguna hermana?
Valorando todas las posibilidades, seguro que descubrir estos consejos de decoración para habitaciones de niña te ayudará a dar en el clavo.
Recurre a los tonos pastel
Tradicionalmente, se ha tendido a pensar que los colores más apropiados para las habitaciones de los niños eran el azul (en caso de ser chico) y el rosa (si se trata de una chica). Pero, lejos de esta simple clasificación, la paleta de colores ofrece un sinfín de tonos pastel que pueden ser usados para pintar las paredes de cualquier habitación para niña.
Por ejemplo, el blanco, el gris, el beige, el verde, el lila o el amarillo, en sus tonalidades más suaves, pueden quedar perfectos en este tipo de cuartos. ¡Incluso combinados entre ellos!
No descartes el papel pintado o los vinilos
Pintar las paredes con vuestros colores favoritos no es la única opción para animar el dormitorio de una niña, ni mucho menos. Valora la posibilidad de pegar vinilos decorativos o papel pintado, con los motivos que creas que más le van a gustar.
Escoge su personaje de animación favorito, un motivo floral o decora las paredes del cuarto con dibujos de animales. ¡El resultado puede ser sorprendente! Además, estas soluciones pueden ser las ideales si tu niña es pequeña y crees que al crecer sus gustos pueden variar, pues pueden cambiarse fácilmente.
Aporta color también con los complementos
Y no te centres únicamente en las paredes para darle ese toque colorido que todas las habitaciones de niña necesitan para transmitir alegría y despertar su imaginación. Son muchos los complementos con los que se puede conseguir este objetivo, como por ejemplo las cortinas o los marcos de las láminas o cuadros que puedas colgar.
Incluso la lámpara del techo o la mesita de noche puede convertirse en el objeto que aporte esa gracia y ese toque original al dormitorio.
Coloca un cabecero que despierte su imaginación
Un cabecero no es solo un elemento útil para delimitar el espacio de la cama y para impedir que nuestra cabeza entre en contacto directo con la pared. También puede ser el objeto perfecto para presidir la habitación de una niña, pues existen múltiples posibilidades en este sentido.
Escoger uno colorido, con un estampado original o incluso basado en su película favorita puede marcar la diferencia entre una habitación más y una habitación de niña original.
Decora las paredes con sus creaciones
Otra opción a la hora de aportar originalidad al dormitorio de una niña, que además le dará un toque muy personal, es la de ir colocando en las paredes o en los estantes sus dibujos, sus manualidades, sus juguetes desmontables o sus recuerdos. Ella misma podrá ir coleccionándolos y organizándolos, y además se irán adaptando a su edad y a sus gustos.
O deja que use sus propias fotos
¿Qué tal si le dejas decorar su espacio con sus fotos? Ya sean las fotos que ella haga (si le gusta la fotografía y es ya algo mayor) o las instantáneas que la muestren a ella en diferentes situaciones: disfrazada, de cumpleaños, con amigos, en la piscina o incluso una serie que refleje cómo va creciendo. ¿Te imaginas lo bonito que podría quedar su dormitorio?
Además, estas fotografías se pueden pegar en la pared, colgar con originales marcos o recurrir a otras formas de exhibición, como puede ser una cuerda de extremo a extremo y unas pequeñas pinzas, o un sencillo corcho que haga las veces de tablón fotográfico.
Decántate por una cama en altura
Respecto a la cama, no hay que olvidar que este elemento puede ser, además de funcional, un lugar para jugar e imaginar, sobre todo si la sitúas en altura. Esto significa que la cama se instala en un altillo, al que la niña accede a través de una escaleras, dejando toda la parte de abajo libre para destinarla a lo que más le guste hacer.
Jugar, estudiar, leer o disponer de un espacio para relajarse. Debajo de una cama en altura puede colocarse un espacio con juguetes, un escritorio o unos originales pubs. Los límites solo los marca la imaginación.
¿O prefieres una litera?
Otra posibilidad es la de colocar una litera con dos camas, bien una encima de otra o ambas en forma de ele. Este tipo de distribución es especialmente apropiada para las habitaciones compartidas, en las que duermen dos niñas. Además, ayudarán a ahorrar una gran cantidad de espacio.
La practicidad de las camas nido
Si lo preferís, podéis optar por una cama nido. Este tipo de cama contiene otra adicional en su parte inferior, que se saca y se mete según se necesite. ¿Cuándo decantarte por esta opción? Especialmente, cuando la niña duerma sola, pero reciba muchas visitas de primos o amigos.
Además, cuando crezca y deje de compartir su habitación con visitas, ese espacio que ocupa la cama inferior puede ocuparse con amplios cajones que servirán de espacio de almacenaje, algo que se va haciendo más necesario conforme cumplen años.
No olvides colocar una alfombra
Que la niña tenga una gran alfombra dispuesta en el suelo de su habitación, preferiblemente a los pies de la cama o cerca de su zona de juegos, es fundamental. Básicamente, porque, sobre todo cuando son más pequeñas, tienden a sentarse o tumbarse en el suelo a jugar, colorear o leer cuentos.
Si no quieres que la niña pase frío o se haga daño, lo mejor es que te decantes por colocar una alfombra en su cuarto. Ten en cuenta que puedes elegirlas, además, bien mullidas, suaves e, incluso, de divertidos colores o estampados.
Cojines, cojines y más cojines
En la misma línea, que cuente con suficientes cojines es también muy importante. Precisamente por su pequeño tamaño y baja estatura, es muy posible que necesite cojines para sentarse en la silla a hacer los deberes, o para elevar su cabeza mientras lee en la cama.
Por eso, es buena idea que llenes de varios cojines su cuarto, que además pueden ser, a la vez, elementos decorativos de lo más llamativos.
Adapta el mobiliario a la edad de la niña
No se trata tan solo de ir cambiando los infantiles colores o los textiles conforme la niña vaya creciendo, sino de adaptar el espacio del dormitorio a sus nuevas necesidades.
Por ejemplo, si optaste por comprarle una cama infantil, probablemente tendrás que cambiarla por otra más grande, igual que el mobiliario. Y es que su habitación deberá disponer de todo lo necesario para adaptarse a sus nuevas ocupaciones y aficiones.
En este sentido, lo más aconsejable es que desde el principio optes por llenar el dormitorio de muebles y decoración versátil, que pueda servir para cualquier edad o que, por lo menos, pueda cambiarse o modificarse fácilmente.
Asegúrate de que disponga de suficiente espacio de almacenaje
También pensando en el futuro, es clave que dejes espacio libre para ir introduciendo mobiliario de almacenaje, o bien que lo instales en la habitación de la niña desde el primer momento.
Ropa, zapatos, libros, juguetes, recuerdos… Un cuarto infantil es un lugar en el que se tiende a coleccionar objetos de todo tipo. Y esto supone un riesgo, pues puede convertir el dormitorio en un auténtico desorden y ser incómodo o incluso peligroso también para la propia niña. Por eso, las soluciones de almacenaje infantiles son también fundamentales.
Descubre qué pueden aportar las cómodas infantiles
Por ese mismo motivo, para tener en cuenta las necesidades de almacenaje de los dormitorios para niñas, se han diseñado las cómodas infantiles. Además de servir para guardar todo los que las niñas van acumulando, las cómodas infantiles pueden ser excelentes elementos de decoración y servir también de expositores.
Eso sí, debes tener en cuenta dos cuestiones importantes. En primer lugar, que combine al máximo con el resto del mobiliario. Y, en segundo lugar, que, en la medida de lo posible, no represente un peligro para ellas, optando por ejemplo por las que tengan las puntas redondeadas.
¡No te olvides de los espejos!
Tendemos a pensar que, al tratarse de habitaciones infantiles, los espejos están de más. Pero, muy al contrario, los niños también pueden encontrar de utilidad un espejo de cuerpo entero en su armario o uno más pequeño en una de las paredes de su habitación.
El hecho de poder verse en el espejo para comprobar si están bien preparadas para afrontar el día es también muy importante en el caso de los niñas. Además, los espejos, bien colocados, también pueden servir para aumentar la iluminación de la estancia o incluso para jugar con otros elementos.
Encuentra el equilibrio entre la fantasía y la simplicidad
A la hora de implementar todos los consejos anteriores, debes tener siempre clara una premisa: buscar el equilibrio entre el exceso y el defecto, entre la fantasía y la simplicidad. No por el hecho de tratarse de un dormitorio infantil vale todo, es necesario pensar que los elementos que en él se coloquen deben gustarle y no saturarle.
Por otro lado, si se tiene miedo a superar cierto límite, es posible que nos quedemos cortos a la hora de decorar una habitación infantil. En ella, debe haber luz, color, diversión y originalidad, pero en su justa medida y acorde a su personalidad.
Conclusión
El color de la habitación, la elección de los complementos y del cabecero, la adecuación del mobiliario, el tipo de cama, los textiles o los espejos… Nada en el dormitorio de una niña debería estar escogido al azar, ya que es el espacio que marcará sus ratos libres y sus momentos de trabajo y de ocio.
En su cuarto, la niña tiene que sentirse a gusto con todo lo que le rodea, por eso es tan importante que, en la medida de lo posible, tengas en cuenta estos consejos y, sobre todo, sus preferencias.